#Reflexión nº 413

Yo me asombro cada vez más con las vueltas. Sí. Las vueltas que dan la cosas, las vueltas que le damos a nuestra cabeza, las vueltas que da uno por encontar a alguien. Ese alguien,en cuestión. Quien, unas veces te decepciona, otras veces te sorprende haciéndote sentir mariposas en el estómago, cuando creias que ya estaba enterrado en lo más profundo de tu mente.

Las vueltas que das tú, a todo, a tus errores, a cosas que no han sucedido, pero que ¡JODER! pueden suceder. Qué disparate. Puedes pasar un buen momento, pero no, tú amárgate pensando en lo que puedes perder dentro de unas semanas.

Ahora hablo yo, que ya estoy cansándome de escribir como un escritor de libros de autoayuda.
Que ya me canso, joder,me canso. Que ya me toca una tregua,un momento de desconexión, de paz, de no pensar. De  dar tiempo al tiempo.De no pensar en lo mal que hice en X momento, o lo mal que puedo hacer X cosa. Perfección? Que no existe, y el miedo, está siempre.

PD: Os deseo lo mejor, yo ya me entiendo.